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Showing posts from 2006

Capítulo 3. La leyenda de los HSH

Sin saber como tocarla, guiaron a nuestra desconcertada mujer a su guarida. Caminaron por varias calles sucias, grises y destruidas; el aire pesado jugaba con bolas de papel de periódicos viejos; las montañas ya no tenían el mismo esplendor y un verde muerte se extendía en las cordilleras. Un paisaje triste en realidad, todo lo contrario a lo que se pensaría de un mundo dominado por gays. El brillo de los colores del arco iris no aparecía por ningún lado, su esquizofrénica perfección faltaban en cada esquina de la ciudad. No había moda, no había arte, no había plumas, canutillo y lentejuelas. Parecía más bien, un mundo dominado por hombres solteros sin madres, recién independizados. Bajaron muchas escaleras y cada vez se iban alejando más de la luz. "Por alguna razón morí en la nevera y fue un error que llegará a este infierno donde los gays serán castigados por su 'situación'" pensaba. Llegó un punto en que sus ojos no vieron más por la abrumadora oscuridad, y a

Capítulo 2 - El Futuro de "El Futuro Ideal"

Donde estaba la nevera le cortaron la energía, así que poco a poco se fue descongelando, derritiendo su capa de hielo hasta que quedo descubierta su piel blanca aun más pálida. Empujó la puerta despacio pues sus articulaciones aun no se movían bien, y al abrirse la puerta se encontró sólo con el paisaje de su ciudad destruida, acabada, con una extraña sombra de tristeza. La pared de lo que era su cocina, estaba demolida dejando un inmenso hueco que te tiraba al abismo del edificio. Bajó como pudo, y sólo veía las ruinas de su ciudad, no sabía ni lo que había pasado ni cuánto tiempo duró ella en la nevera. La Ciudad estaba desolada, vacía, silenciosa. "El mundo se vino abajo sin mi" pensaba ella en una de sus personalidades. Caminaba despacio mirando como no quedaban ni los cimientos de los edificios que antes ocupaban la vista desde la ventana de su casa. Aturdida por el silencio de la muerte, preocupada por el pasado de los suyos y el futuro propio; pero en su caminar la so

Capítulo 1 - Un Futuro Ideal

Lo último que le hizo, lo que revaso la copa, fue que se fue a esa discoteca gay sin ella, y aunque le dijo que iba ir le ordeno que no lo acompañara, que a el le gustaba más ir sólo. Eso fue lo que la cansó de todos los hombres de este mundo, de este tiempo, de su vida. Todos unas locas plumosas, maricas hasta la medula, hachas de lentejuela y canutillo desde las uñas de los dedos de los pies hasta la punta del cabello. Un homosexual tras otro eran los hombres con los que ella se encontraba, los hombres de los que se enamoraba, los disque hombres que se fijaban en ella, y las hombres que terminaban siendo al finalizar su relación. No más, era suficiente de esta treta del destino, no era justo y más que eso era desquiciante. Por eso, con el corazón lleno de sangre hirviente y una ira de volcan, sacó las laminas de la nevera, aumentó la temperatura al máximo y se encerró en ella esperando un futuro digno de su feminidad y su cuerpo, uno que apreciara el sabo de una mujer y que no se fue

Mi jugo no tiene preservativos

El sol brillaba como nunca antes había brillado en la ciudad, sus rayos de sol se metían por toda ranura o rejilla que encontrara para quemar algún cuerpo sudoroso. Por las montañas no se veía una sola nube y el viento no venía nisiquiera a traer esperanzas de que se acercarían buenas sombras celestiales. Creía que en el parque, a las sombra de los árboles me iba a refrescar y que el mismo sonido de sus hojas que bailaban con el aire me harían olvidar del infierno pegotudo que estaba viviendo la ciudad; pero no, todo lo contrario, el calor era más intenso, más ardiente, golpeaba mi cuerpo lleno de ira, envolvía con su temperatura hasta lo que no salía a la luz y mi ropa se llenaba de asquerosas islas humedas que se pegaban a mi cuerpo. Abría la boca, ampliaba las fozas nasales y hacía un esfuerzo inutil por que mis oidos se abrieran más para que circulara algo de ese espeso y escaso oxigeno que se deslizaba como un liquido amargo. Me secaba unas cuantas gotas de sudor que se habían ge